Habló sobre las elecciones, el panorama político en la Argentina y la falta de calidad democrática.
PA: Con respecto a la crisis internacional, muchos intelectuales han salido a decir que se avecina el fin del capitalismo. Se sabe que el capitalismo no va a caer de un día para el otro, pero a lo largo del siglo pasado y de éste ya van varias veces que se desmorona y que tiene fuertes crisis, ¿piensa que estamos en plena transición hacia un nuevo sistema?
OB: La esperanza es que sí, que el mundo comprenda que el capitalismo no soluciona ningún problema, como lo dice la crisis que estamos viviendo. No soluciona ni siquiera los problemas del país más ricos que es Estados Unidos, y siempre pagan los de abajo. La gente que se ha quedado sin trabajo como en España, Francia, Alemania, son los que pagan el impacto siempre.
Se tiene que entender que la única manera de salir adelante es administrar lo poco o lo mucho que nos da este planeta, la naturaleza, y saber repartirla para vivir en paz. Siempre me pregunto si el mundo en vez de gastar en guerras, en armas, en destruirse ciudades enteras, se hubiera gastado en la ciencia. Creo que ya sabríamos de dónde venimos, qué es lo que nos rodea, es decir, el inmenso universo. Además, podríamos realmente vivir todos con dignidad. Gastar ese dinero en escuelas y cosas positivas.
Las organizaciones mundiales tienen que aspirar a lograr la paz eterna y no favorecer a los capitales internacionales. No hay remedio, lo ha demostrado el capitalismo con sus agresiones de todos los años y de todos los tiempos. Si no quieren llamarlo socialismo, que lo llamen una buena administración y repartición de los bienes para todos, pero que no haya hambre en ningún lugar y que haya trabajo para todos.
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