Casi como una leyenda urbana

La mayoría seguramente desconozca qué son los alfajores Capitán del Espacio. Por cuestiones de distribución apenas se los consigue en los kioscos de la ciudad. Sin embargo, en el sur del conurbano bonaerense, por Avellaneda, Lanús o Quilmes, son más que populares.

Con un sabor único, según definen sus consumidores, de dulce de leche o de chocolate, de un valor de 50 centavos, los alfajores Capitán del Espacio sobreviven a base del boca en boca. Su dueño, Angel de Pascalis, sigue una estrategia contraria a las leyes del mercado y se niega a ampliar la pequeña fábrica que ya tiene unos 40 años porque "lo que venden les alcanza para vivir". No obstante, la producción no da a basto, lo que complica aún más las posibilidades de encontrar estos alfajores que van por el camino de convertirse en una especie de leyenda urbana.